domingo, 4 de noviembre de 2012

ella.


Cuando no te apetece mirar a nadie a la cara cuando piensas que todo lo que hay a tu alrededor poco a poco se va derrumbando cual castillo de naipes cuando piensas que nada más puede salir mal  porque piensas que la ley de Murphi debería llevar tu nombre y no el de ese tío afortunado que pensó que lo suyo eran desgracias pero lo cierto es que comparado con lo tuyo no eran más que granos de arena .... entonces ocurre entra esa persona por la puerta, esa que siempre esta a tu lado con la que has pasado malos momentos la has tratado peor que a nadie pero aun así entra por la puerta te mira fijamente a los ojos y dice "No te preocupes hija, esto se solucionara" es en ese preciso instante  cuando piensas que lleva razón que la gente va y viene pero ella pasen los años y pase lo que pase siempre estará a tú lado. Por que no hay nada mas consolador que un abrazo a tiempo ni nada más edificante que una mirada de aprovación de las suyas y no hay nada por lo cual me e de sentir más orgullosa que de tenerla a ella por madre.

1 comentario:

  1. Puuf que gran verdad la verdad que en momentos duros sabes que siempre puedes contar con ellas.Da pena decir adiós a alguien o algo y duele pero ellas siempre están para ayudarte cuando los demás no puedan aunque tu sientas que como tu dices te estas derrumbando,aunque quien sabe si se derrumba el castillo es porque nos atrevemos a hacerlo sin pensar en lo duro que sera acabarlo sin que el viento se lleve las cartas.Pero al fin y al cabo haber empezado esa partida puede ser lo que mas grande te a echo y mas felicidad te a echo sentir.En fin supongo que aunque el viento haya tumbado ese castillo algún día no todas pero muchas de esas cartas se volverán a juntar para si no hacer el mismo castillo por lo menos una fortaleza.Al fin y al cabo somos niños a los que nos gusta jugar y como todos los niños cuando jugamos tenemos el riesgo de perder.
    Aunque insisto me encanto hacer ese castillo juntos aunque le haya tenido que decir adios a mi princesa.Yo nunca fui ese principe azul aunque me conformo con haber llegado a sapo,porque como en los cuentos recibi mas de lo que me merecia.

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